sábado, 7 de marzo de 2020

CURSO ERASMUS+

A Satisfying School Experience: Strategies and Skills for Teachers


El Erasmus+ que he realizado tuvo lugar en Florencia, en la academia “Europass Teacher Academy”, entre los días 5 y 10 de agosto de 2019. Así, asistí al curso “A Satisfying School Experience: Strategies and Skills for Teachers”, donde aprendimos algunas de las claves de la educación emocional que se pueden aplicar en los centros educativos, tanto con el alumnado (mindfulness), como con el profesorado (prevención del estrés y burnout). No obstante, considero que los aspectos más enriquecedores de la estancia se relacionan con el intercambio cultural entre los diferentes profesores que hemos presenciado el curso. De este modo, hemos compartido experiencias docentes de nacionalidades diversas, como Chipre, Hungría, España, Polonia, Bulgaria y Austria.
Así, el primer día, dedicamos la sesión a presentar cada centro educativo y el trabajo que realizamos (página web, imágenes, vídeos, proyectos y actividades). Al final de cada exposición, preguntábamos a los compañeros sobre los aspectos que más nos habían llamado la atención, por lo que dedicamos bastante tiempo a este intercambio cultural inicial.
Además, la academia organizó varias salidas culturales que fomentaron la convivencia entre los participantes del proyecto Erasmus+. De esta manera, el cuarto día asistimos a clase por la mañana, pero, durante la tarde, disfrutamos de un paseo turístico guiado por un especialista en arte por los sitios más emblemáticos de Florencia. Asimismo, el último día, se preparó un pequeño viaje a San GimignanoSiena y Chianti para todos los alumnos del centro.
Aparte de estas jornadas culturales, hay que tener en cuenta que durante el desarrollo de las clases, de manera espontánea, debatimos sobre diferentes asuntos educativos y analizamos similitudes y diferencias en cada país. A continuación menciono algunos de estos aspectos: valoración social de la profesión, recursos de los centros educativos, organización de las enseñanzas, problemas de los estudiantes, evaluación del profesorado, compensación económica o vigilancia en los centros educativos, entre otros. De este modo, descubrimos que compartimos varias de las dificultades que se nos presentan cada día en nuestra profesión.
En definitiva, participar en un proyecto Erasmus+ no solo te aporta nuevas herramientas para trabajar en el aula, sino que también constituye una forma de enriquecimiento cultural. Por consiguiente, contribuye a la mejora de la práctica docente a nivel internacional.
Irene Rubio Gallego

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